31 oct 2011

Azulada.

   La amaba, nadie dudaba de eso, mucho menos ella. Luego de hacer el amor, le tomó las manos a su prometida y jugueteó un poco con ellas. Subió por sus brazos mientras le endulzaba el oído con te amos una vez más. Llegó a los hombros, esos llenitos de pecas que tanto le gustaba contar a punta de besos. Culminó el recorrido en su cuello largo, elegante, y allí se detuvo. Lo rodeó con las manos que segundos antes le habían acariciado el cuerpo entero y empezó a apretar, apretar, apretar...

―Espero que a tu amante le sigas gustando en color azul― le dijo mientras la escuchaba exhalar el último suspiro.


26 oct 2011

Papiroflexia de una mujer.

   Ella, inundada de lágrimas, le dijo al Hombredesuvida que quería ser libre, que la rutina le estaba disecando el espíritu, que entendiera. Él, sin mediar palabra en un doloroso acto de amor, tomó a la Mujerdesuvida entre sus manos toscas y comenzó aquella ágil pero sencilla labor de transformación, doblándola por la mitad verticalmente quedando un triángulo. Así, entonces, la volvió a doblar horizontalmente y quedó otro triangulito. Le dobló un lado que comprimió hasta formar un cuadrado. Le dió vuelta y repitió el paso anterior. Dobló sus puntitas hacia el centro, marcó y abrió los dobleces. Levantó el vértice hacia arriba para formar el ala y lo mismo hizo con el otro lado (¡otra ala!). Plegó luego hacia adentro y dobló las puntas inferiores hacia arriba para marcar. Desdobló una vez más (no desesperes, Mujerdemivida, ya casi termino). Abrió cada parte y subió la punta para formar la cabeza y repitió con la otra para formar la cola. En la parte de la cabeza quebró la puntita, (un poco nada más) para formar un pico elegante. 

   Finalmente tiró de las alas. La convirtió en una grulla de papel: blanca, inmaculada y sobre todo, libre, como ella quería. 

-Ahora sí, levanta vuelo. Puedes partir.



23 sept 2011

Ilusionismo.

 
Seducirte
llegarte al alma y más allá:
quedármela.
Tenerte y no dejarte ir
ser egoísta por puro placer:
sin importar.
Dejarte tenerme
por el doble de placer
sólo porque asi lo deseo:
un ratito nada más.

Tocarte y escaparme.
Enredarte y desaparecer.
Ser efímera,
hacerte dudar de que existo.

¿Me tuviste alguna vez?

7 sept 2011

Experimento automático.

   De repente son las 11:11 de una noche vacía y tú sin asomo de sueño te tomas una copita de vino de un sólo tiron sin pensarlo mucho y te sientas en frente de tu ordenador a escribir así de un sólo tirón también como por impulso así sin pensarlo mucho sin esperar sin querer sin coherencia sin idea de cómo terminará así como desnudandote de palabras que pesan y de ideas que pesan y de sentimientos que estorban o de otros tantos que tienen la esperanza de que les des un poquito de vida o un poquito de respiro o una última oportunidad a ver si ocurre algo o a ver si finalmente mueren porque nunca estuvieron destinados a que ocurrieran y entonces te das cuenta que la luna te alumbra y que ahí estás tú en frente de tu ordenador escribiendo tonterías que has permitido a tu incosciente escribir por tí porque la inspiración la tienes como ausente porque la inspiración se te fue de vacaciones a alguna isla paradisíaca del Caribe o del Pacífico Sur y todavía no vuelve y tú sólo sabes que quieres escribir que tienes la necesidad de escribir y aún así no escribes absolutamente nada ni teniendo sobre qué escribir y lo haces porque aparentemente aún no te surge la chispa para escribir tonterías mejor redactadas y con un poco más de sentido o de lógica para que la gente te lea y sepa que estás y les muestres tu mundo inventado primeramente para ti porque eso de andarlo mostrando a los demás puede resultar hasta algo exhibicionista y te preguntas si alguien lo pueda leer y llegue al menos a la mitad y también te preguntas si aunque pase la engorrosa prueba de leerlo completo lo entenderá así con todo y esa falta de respeto a los tiempos y por supuesto no persigues la idea de que guste y mucho menos de que te entiendan ese invento de probar eso de la escritura automática y sabes que admirarás a ese alguien que lo pueda leer completo palabra por palabra sin saltarse alguna de ellas tratando de seguir el hilo apresurado de este compendio de sinsentido que ni yo que lo estoy escribiendo logro entender.  

(Ahora sí, puede usted respirar.)

19 ago 2011

Ser escritor.

(…) ser escritor, cuando ya se sabe escribir, es convertirse en un extraño, en un extranjero: tienes que empezar a traducirte a ti mismo. Escribir es hacerse pasar por otro, escribir es dejar de ser escritor o de querer parecerte a Mastroianni para simplemente escribir, escribir lo que escribirías si escribieras. Es algo terrible pero que recomiendo a todo el mundo, porque escribir es corregir la vida -aunque sólo corrijamos una sola coma al día-, es lo único que nos protege de las heridas insensatas y golpes absurdos que nos da la horrenda vida auténtica…

Enrique Vila-Matas.

2 ago 2011

Cruce de miradas.


   Se están besando desde que cruzaron sus miradas. Se tantearon un poco y ya se besan despacio, lentito, con las pupilas que se dilatan de puro gusto, enormes, como hoyos negros para tragarse el uno al otro. Se acarician con las pestañas, con ese deseo de detener el tiempo; con ese deseo de tenerse y no separarse jamás. Ruegan el acercamiento con el brillo que se percibe en el color de sus ojos oscuros. Y se complacen. Juntan los labios y enredan las lenguas incendiadas de ganas. Se queman. Se hacen ceniza. Renacen. Se aman. Al menos por cinco minutos, antes de bajarse en la próxima estación del tren.

22 jun 2011

Ansias.

A ella le gusta él. A él le gusta ella. 
Engranan perfectamente como piezas de reloj antiguo 
porque desde hace mucho se conocen aunque es ahora que se juntan. 
Él es fuego encendido desde el vientre voraz. 
Ella es fuego que ha aprendido a dominarse.

Se entienden, se comprenden, se miden a distancia, ruegan por tocarse pronto. 
Él así lo desea, ella también... pero aún teme. ¿A qué temes, niña? 
El amor es así, llega de improvisto, arrastra y arrasa, eso lo has sabido desde el primer hombre que se cruzó en tu camino, desde ese primer 
otro hombre que aprendiste a seducir. 
¡Ah! Es que siempre has temido a lo desconocido. 
Él no. Él ha aprendido a no perder lo que quiere.


30 may 2011

Ella es.


Labios rojos, incorregible ella es. Dulce intriga, pasión de color rosa y otros tantos colores que de repente se le antojen. Ojos de media noche. 
(De nadie).

Enredadera de letras que atrapa los ojos de los incautos buscadores de emociones, que al entrar en ellas encuentran un laberinto de pasión. 
(No hay manera de escapar).

¡Pobre del que ante su merced caiga y no encuentre la fuerza para desear una salida 
y prefiera un mentira verdadera que llene su corazón!
 (Sí. Pobre).

*Descripción que me hizo mi amigo @yarumphotos desde la perspectiva de su intuición. Tal vez tenga razón... Tal vez no.*

16 may 2011

Café.

   Osadamente me atreví a levantar la mirada y verle directamente, desafiante, a los ojos, esos ojos café caliente con dos de azúcar. Fue un error. Aposté a adentrarme a su alma, robarme algún sentimiento y salir ilesa... No pretendía que él fuese la excepción. Él también tenía que caer. Sin embargo, resultó lo peor, lo que no quería: me perdí en él, en el brillo enigmático de sus dulces ojos café. Ya no sé cómo volver.


* Imagen aportada por mi amigo Yarum @yarumphotos (Mil gracias)

27 abr 2011

Madrugada.

   
   Ésta madrugada es oscura y espesa. Tiene un olor exquisito y penetrante: a flores de primavera. La bebo en pequeños sorbos para que no se me olvide su sabor al amanecer. Me bebo sus estrellas, su rocío, su vida y el placer que causa en mi.

   Ésta madrugada me embriago con tu recuerdo y tu ausencia que me acompaña a perder la consciencia de manera total; ausencia que me ve de lejos y, descaradamente, se ríe mirándome directo al corazón. Hace mucho que no me pasaba esto, hace años que no te extrañaba tanto.

   Así pues, no es bueno que se junten el vino, la madrugada fría, la nostalgia y la melancolía... Mucho menos que tenga frente a mi y al alcance de mis manos, recursos como una pluma y un papel para desahogar todo esto.

21 feb 2011

Decisión.

 

...Y entonces el patito feo creció para convertirse en cualquier animal negro. Pudo ser una oveja negra... o un cisne negro.
Sin embargo, ella decidió tener el misterio, 
poseer la oscuridad y la sombra, vivir con ella. 
Decidió ser pantera.

19 feb 2011

Placer.


Lo tomé entre mis manos con un deseo que sólo él sabe. Lo vi, lo olfatee y la boca se me hizo agua. Lo empecé a desvestir lentamente mientras crecían mi ansias, era tal mi necesidad de tenerlo desnudo...! 

Lo olfatee una vez más y sentí excitación. Lo mordí... Lo lamí... Lo volví a morder... Era el placer de saborear el chocolate que me estaba comiendo. Era la maravilla que alegraba mi día.

18 feb 2011

Mar.


El corazón de piedra fue partido en dos y le salió toda el agua que había retenido durante años en forma de lágrimas.  
Hizo así su propio mar.

17 feb 2011

Búsqueda.


Caperucita Roja buscó incansable a su lobo por el bosque... 
Lo encontró. 
Se lo comió.

14 feb 2011

Feliz Día de Hacerle El Amor a La Amistad.

   "Esta vez tendré puntería", pensó Cupido antes de disparar esa bonita flecha dorada a la chica castaña que estaba acompañada de un joven apuesto mientras compraban unos regalos. Y la verdad es que sí, tuvo buena puntería, lástima que no fue certero. La flecha llegó al corazón de la chica y ella de repente vió a su acompañante como  el hombre más bello del mundo. Le dió una cosquillita en el corazón que luego se le extendió hacia abajo sin saber por qué. "Debo estar mal, muy mal", pensaba la chica castaña. 

   El chico, la vió hermosa y coqueta ese día. Ya lo sabía, pero hoy sólo podía centrarse en ella, en cómo lo miraba, en su olor a flores... Él también sintió la cosquilla en el corazón y también se le extendió hacia abajo. Compartieron un helado, no aguantaron más y compartieron un beso, siguieron sin aguantar y se fueron a un hotel a compartir los cuerpos y el corazón, a hacerle el amor a la amistad.

   Ya luego se dieron cuenta que era tarde, se tenian que ir. "Te amo", "Yo también", se dijeron antes de bajar del auto y darle los regalos a la novia del joven apuesto que los esperaba tranquila con cena en casa: "Feliz día del Amor", le dijo él a su novia; "Feliz día de la Amistad", le dijo la chica castaña a su mejor amiga.

20 ene 2011

Gravedad.


   El cabello rojizo, largo y suave es acariciado por el viento una y otra vez. Lo enreda y desenreda a placer. Siempre le ha encantado esa sensación a Isabel cuando va a alta velocidad en la autopista o cuando está en el parque un día de primavera. Sin embargo, hoy disfruta más esa sensación.

   Hoy el viento entra y sale de ella, la ama y la posee. Se siente feliz porque al fin vuela como siempre lo deseó, se siente libre después de tanto por lo que ha pasado en esta vida que tan mal la trató. Se siente de nadie y etérea. Se deja caer, se deja atraer al centro del planeta. Ha tenido unos segundos para pensar lo suficiente desde que se lanzó del último piso del edificio y ha pensado que quizá fue un tanto extremista... pero ya no hay tiempo para regresar.

11 ene 2011

El Tercer Botón.


Era que se era una vez
la historieta de un botón,
que soñaba cada noche
con ser un gran girasol.
Y cuando por la mañana
abrochado a una camisa,
se observaba en el espejo,
su sueñito se rompía.

“Si al menos fuese la tela
de un color más amarillo;
si en vez de ir siempre hacia el frente
fuera al cielo donde miro...”

Nunca nadie le hizo caso
al quejarse en el ropero,
hasta el día en que un zapato
le contestó a su lamento:

“Tienes el mal de los hombres,
que ansían lo que no alcanzan,
con los ojos siempre puestos
en aquello que les falta.
Así se pasan el tiempo
sin saber que justo al lado
tienen la luz de sus vidas
iluminando sus pasos.”

Se pasó toda la noche
Dando vueltas en silencio.
“¿Qué será?”, se preguntaba,
“¿aquello que yo no encuentro?”
Por eso cerró los ojos
para así ver nuevas cosas
y en seguida lo escuchó
latiendo bajo la ropa.
¿Cómo nunca se dio cuenta
del lugar privilegiado?
Pues siempre el tercer botón
tuvo el corazón debajo.

(http://borronycuentonuevo.blogspot.com/)

10 ene 2011

Monstruos.



La despertó su aliento de alcohol y tabaco y su cuerpo comenzó a temblar. Ahogó como pudo los sollozos porque no quería que sus hijos la oyeran. Intentaba desvestirse antes de que él le hiciera más daño arrancándole la ropa, mientras él forcejeaba y la insultaba y se enfadaba cada vez más.

La poseyó con violencia, pero ella todavía no sentía el dolor físico, eso llegaría después, ahora se desesperaba con sus gemidos y sus insultos temiendo que los niños pudieran oírle.

El suplicio duró unos minutos eternos, los que tardaron en llegar los golpes y una nueva avalancha de insultos, hasta que, agotado, se quedó por fin dormido.

Se levantó en silencio, se echó por encima lo primero que encontró, se limpió la cara de babas y sangre y se acercó a la habitación de sus hijos con el corazón encogido.

Comprobó aliviada que dormían y regresó a la cama.

Se despertó llena de angustia, estiró con miedo la mano hacia el otro lado de la cama: él todavía no había llegado.

(Avelino Vallina, de Ebude)

7 ene 2011

No ser tú.


   Esa primera vez en la que vi tu rostro totalmente desencajado de la rabia que te poseía sin control, te vi salvaje y primitivo. Fue en ese instante cuando prometí no ser como tú. Nunca... jamás.  

   Prometí que no tendríamos punto de comparación, sólo esos rasgos físicos que no puedo cambiar por ser tu hijo. Prometí que nadie diría ese "eres igual a tu padre" que tanto me ha hecho hervir la sangre porque no lo soy y tampoco quiero serlo. 

   Trabajo todos los días en eso, Padre. Y ese es mi orgullo, no ser Tú ni por equivocación.

6 ene 2011

A ciegas.

   El mundo da muchas vueltas. Muchas de esas vueltas son tan rápidas que nunca supimos cómo llegamos exactamente hasta cierta situación o a la vida de cierta persona. Eso fue lo que le pasó a Andrea.

Andrea juró a sus 12 años que nunca se iba a enamorar. Veía que el amor era, en la mayoría de los casos, sinónimo de sufrimiento. No entendía cómo algo que se suponía debía ser hermoso, terminaba tan mal.

Así fue feliz hasta los 15 años cuando lo conoció a Él. Pudo haberlo conocido en un café, en el colegio, en un centro comercial y tropezar, pero no. Cupido tuvo la genial idea de enamorarlos a ciegas como lo es él. Internet fue el medio, el puente de comunicación entre ambos. ¡El mundo y su tecnología y sus redes que atrapan!

La mente de Andrea le decía que eso no tenía sentido, que recordara su juramento, que lo dejara y se olvidara de él y de la falsa ilusión que Él producía en ella sin explicación alguna. Aún estaba a tiempo. Mas, sin embargo, ¿quién le hace caso a la razón cuando el corazón palpita indomable y susurra que todo es perfecto al hablar con Él, al escucharlo reír? ¿Quién presta atención a la razón cuando el corazón recita todas las aventuras que juntos han imaginado en mil lugares distintos del Universo con sólo cerrar los ojos?

Andrea sólo escuchaba a su corazón y se enamoró porque así lo quiso. Decidió enamorarse de lo que Él le contaba de su vida, de su alma. Se enamoraron así, sin aparente sentido y así fueron felices: de lejos, sin jamás verse, sin cruzar miradas. Sentían miedo de arruinarlo todo. Sí. Creo que así eran felices.

Finalmente, Él decidió viajar, dejar el país, irse muy lejos y Andrea no estaba en sus planes. Se despidieron a distancia, como fue toda su historia. Ahí se iba el amor de su vida o al menos el primero que había amado. Ahí se iba el hombre que nunca conoció en persona pero al que se entregó sin saber cómo ni por qué. Ahí se quedaba ella, en su ciudad, con el secreto de haberlo amado muchas veces más que a ella misma, con el secreto de haber amado a un desconocido tan conocido. Ahí estaba ella con una promesa rota, una historia de amor insólita y sin mucha lógica; con un aprendizaje y las esperanzas ocultas de verlo algún día antes de morir.